La base ideal y los subtonos de tu piel.

¡Hola a todos/as! Hoy vamos a hablar de nuestra mejor amiga, la base; esta no debe de ser una máscara, debe convertirse en una aliada imperceptible, muy discreta. 
No todas las bases nos sirven a todas, simplemente porque tenemos necesidades diferentes, así que si tu mejor amiga te recomendó una base y no te funcionó, no te frustres porque no hay un mismo producto que nos satisfaga a todas (¡no es chocolate!), mejor seguí leyendo...

LA BASE DE LOS ERRORES DEL MAQUILLAJE ES, LA BASE.

El tono de la base no debe ser ni más claro ni más oscuro que el tono de tu piel, es obvio, pero al parecer hay muchas que aún no logran dar con la base que se adapte perfectamente a su tono de piel. Encontrar el tono correcto es más difícil de lo que parece. El primer paso es apelar a tu sinceridad, observate y tratá de descifrar cual es el subtono de tu piel.

Subtonos

Hay tres tipos de subtono: frío (rosa), cálido (amarillo) y neutro (amarillo y rosa).

La piel con subtono frío tiene un poco de azul en su composición (no evidente, ¡no somos los Pitufos!)
La piel neutra se pasea entre el tono amarillo y el rosa.
La piel cálida es la más amarilla de todas, mientras más oscura sea tu piel, más posibilidades tenés de que éste sea tu subtono.

Si aún tenés dificultades para dar con tu subtono te recomiendo que mires las venas de tus muñecas, si no son muy evidentes tomá dos colitas de cabello que aprieten y colocá una justo cuando empieza tu muñeca y otra a cuatro centímetros, la presión hará que se vean con mayor facilidad.

En mi caso las más chicas se ven azules y las más grandes se ven verdes, estoy en un tono neutro con mayor concentración de amarillo.

Otro gran truco para saber cual es el subtono de nuestra piel es ver como reacciona al sol. Si te bronceás en un tono dorado o cobre, tu tono es de neutro a cálido, en cambio, si te insolás como un camarón, tu tipo de piel es fría.

Tipos de piel

Normal, es aquella equilibrada, no presenta erupciones de resequedad y tampoco grasa en exceso, la piel soñada, este tipo de piel puede usar cualquier tipo de base (líquida, polvo, barra, crema.., lo que sea) y nada la va a afectar.

Seca, ésta es muy sensible. Si al lavarte la cara inmediatamente sentís que tenés la piel tirante, tu piel es seca, la ventaja es que el maquillaje dura más tiempo sobre tu piel y no tenés que estar retocándote a cada rato, pero la gran desventaja es que esta piel se siente afectada por los cambios climáticos (frío o calor) y tiende a arrugarse antes (envejecimiento precoz), pero tranquila, hay muchas cremas en el mercado capaces de ayudar con esto, ¡no todo está perdido!

Grasa, fácil de identificar (es grasa¿?) porque tiene una gran producción de grasa provocada por las glándulas sebáceas. La gran ventaja es que este tipo de piel es resistente al envejecimiento precoz y la desventaja es que el exceso de grasa es visible. 

Mixta, ésta combina lo peor de la piel seca (mejillas secas) y la piel grasa (zona T grasa).

Tipos de base

Base líquida, popular y recomendable, de fácil aplicación, tarda más en secarse por lo que puede distribuirse y difuminarse con paciencia. Su cobertura va de baja a media, así que no vas a estar cubriendo totalmente tu cara (esto depende de las marcas). Este tipo de base es perfecta para la piel seca porque en su composición tiene un gran cantidad de humectantes, pero no significa que los otros tipos de piel no puedan usarla, ¡deciles NO a las que contengan aceites!

Base compacta, al mojarla se convierte en crema y es bárbara para una cobertura total (aunque esta dependerá de la fórmula de cada marca), algunas van desde la más baja hasta la más alta cobertura.

Base en barra, varía de marca en marca, algunas son muy cremosas y otras muy secas, no son muy fáciles de difuminar y se secan muy rápido por lo que la aplicación debe ser rápida. Si sufrís de acné evitá este tipo de base. Es muy pesada para pieles secas. Su cobertura abarca de media a alta, ideal para pieles normales a grasas.

Base en mousse, base ideal para un look ligero, no tiene una gran cobertura, así que si estás buscando esconder algunas imperfecciones no es para vos. Es perfecta para dejar ver tu piel, tus pecas y unificar el tono del rostro. Perfecta para el verano por su sensación ligera, fácil de aplicar y difuminar, ideal para un look natural y para chicas que recién comienzan con el maquillaje, son jóvenes, tienen una piel fresca y quieren ponerse un poquito de maquillaje.  

¿Dónde probar la base?

Cuando vayas a comprar, no te pruebes o dejes que te prueben la base en la muñeca, ¡error! Si la base es para la cara, ¿por qué te la vas a probar en el brazo?
Lo ideal es ir a comprar cosméticos con el rostro limpio, tomá un poco de base y aplicala al final de tu rostro, casi llegando al cuello para unificar el tono de tu cara (que en general siempre está más pálido) con el cuello (que e general está mucho más oscuro).
Nuestra piel no luce igual todo el año, en especial en lugares como Argentina que tiene estaciones, así que tu base de invierno no va a funcionar para el verano. Mi truco es tener varias bases e ir mezclándolas, así no fallo con el color, sea el momento del año que sea.

¡No compres la base sin probártela, tus posibilidades de que vaya bien con tu piel son mínimas! Las bases no están hechas para favorecer a cualquiera, si bien es cierto que con ella queremos esconder los pequeños detalles que no nos gustan, también es cierto que escondiéndolos mal podemos evidenciarlos aún más. El propósito de la base es lucir una piel impecable, no aparentar que llevamos un kilo de maquillaje.

Esparcí la palabra, compartí esta publicación así ninguna de nosotras se equivoca, ¡no queremos invertir en cosas que tengamos que hacer a un lado y no usar nunca jamás!

Vana Ivanova

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